Dicen que quien pisa Formentera una vez, vuelve y no es de extrañar. Y es que esta pequeña joya balear enamora a primera vista. No solo por sus playas de arena blanca y aguas turquesa, sino porque consigue que desconectes de verdad. Es pequeña, sí, pero está llena de rincones para explorar, algunos accesibles fácilmente en moto o en bici, y otros que solo se dejan ver si llegas por mar.
En esta guía te ayudamos a elegir entre las mejores playas y calas de Formentera, según lo que estés buscando. Además, te contamos cuál elegir según el viento, cuáles son perfectas para disfrutar desde el barco y cuáles merecen una visita sí o sí.
En este artículo encontrarás...
ToggleCalas escondidas de Formentera solo accesibles desde el mar
Si hay algo que hace especial a esta isla es que todavía conserva zonas completamente salvajes. Algunas de sus calas más espectaculares no tienen acceso desde tierra o están escondidas entre acantilados, así que la mejor (y a veces la única) forma de llegar es navegando.
Estas son nuestras favoritas para descubrir en una excursión en barco, lejos de las playas más concurridas:
Isla de Espalmador
Separada de Formentera por un estrecho canal de aguas poco profundas, Espalmador es un islote virgen solo accesible por mar. No hay chiringuitos, ni casas, ni ruidos. Solo arena blanca, vegetación baja, aguas transparentes y una paz que cuesta encontrar en otros destinos del Mediterráneo.
Este pequeño paraíso forma parte del Parque Natural de Ses Salines y está protegido por normas medioambientales estrictas. No está permitido fondear libremente, por lo que si quieres visitarla, lo ideal es hacerlo a través de una excursión organizada o fondeando en zonas permitidas con supervisión.
Durante años fue famosa por su laguna de barro, la Bassa d’Espalmador, donde algunos turistas se bañaban en busca de propiedades terapéuticas. Hoy esa práctica está prohibida para preservar el ecosistema, pero la isla sigue ofreciendo rutas suaves para pasear, como el camino hasta la torre de vigilancia de Sa Guardiola.
Si buscas un lugar donde desconectar por completo, caminar descalzo, darte un baño sin masificaciones y sentirte como en una isla desierta, Espalmador es una parada imprescindible durante cualquier travesía en barco por Formentera.

Caló de s’Oli
Situada en la costa oeste del Cap de Barbaria, esta pequeña cala rocosa es tan discreta que ni siquiera figura en muchas guías turísticas. Y eso es parte de su encanto. No hay caminos para llegar a ella por tierra, ni construcciones cercanas, ni cobertura. Un rincón completamente virgen, accesible únicamente en barco.
Fondear aquí te da la sensación de haber descubierto algo que nadie más conoce. Las aguas son claras, con fondos rocosos ideales para nadar o relajarse sin más ruido que el de las olas. Es una parada perfecta durante una travesía por la costa suroeste de Formentera, especialmente si buscas desconectar del todo y disfrutar de la isla sin filtros ni multitudes.
No es una playa cómoda para pasar todo el día, pero sí un lugar especial para una pausa tranquila, un baño reparador o una comida a bordo con vistas que no se olvidan.
Punta Rasa
A pocos minutos en barco desde Cala Saona, Punta Rasa es una de esas zonas que sorprenden incluso a quienes ya conocen Formentera. No es una cala como tal, sino un tramo de costa escarpada con acantilados bajos y formaciones rocosas caprichosas que esconden pequeñas grutas y cuevas marinas ideales para explorar en paddle surf o snorkel.
Este rincón es completamente inaccesible por tierra, lo que lo convierte en un lugar casi secreto, perfecto para quienes buscan fondear lejos del bullicio. Las aguas aquí son especialmente transparentes, con tonos esmeralda que contrastan con el marrón rojizo de las rocas, creando una estampa salvaje y fotogénica.
Al caer la tarde, la luz dorada resbala por los acantilados y el entorno adquiere un aire mágico. Ideal para darse un baño, tomar algo a bordo y simplemente contemplar el horizonte.

Es Racó de sa Pujada
En la vertiente oriental de Formentera, bajo los acantilados de La Mola, se esconde este rincón completamente salvaje y desconocido para la mayoría. Es Racó de sa Pujada no tiene acceso por tierra ni señalización alguna, y solo puede descubrirse desde el mar. De hecho, muchos navegantes pasan de largo sin saber que están ante una de las calas más puras de la isla.
El entorno es abrupto y rocoso, con paredes verticales que protegen del viento y crean una especie de microclima íntimo y aislado. Las aguas son de una transparencia casi irreal, con tonalidades que van del turquesa al azul profundo, dependiendo de la hora del día.
Aquí no encontrarás ni arena, ni chiringuitos, ni otras embarcaciones. Solo mar, piedra y silencio. Es el tipo de lugar que convierte una travesía en una experiencia única. Si te gusta fondear en zonas remotas, sin más compañía que el sonido del agua, Es Racó de sa Pujada es para ti.
Caló des Morts
Ubicada en el extremo este de Migjorn, esta cala encajonada entre rocas y antiguas casetas de pescadores es uno de los rincones más fotografiados de la isla. En temporada alta se llena rápido, pero si llegas desde el mar, puedes disfrutarla como si fuera tuya. La entrada desde tierra es empinada y suele haber bastante gente, así que navegar hasta ella es lo más recomendable si buscas algo más íntimo.
Su acceso por tierra es empinado y algo limitado, lo que no impide que en temporada alta se llene con rapidez. Por eso, quienes llegan desde el mar tienen una ventaja: pueden disfrutar de esta joya sin agobios, fondeando cerca y bajando con calma.
Sus aguas son profundas y cristalinas, perfectas para nadar o hacer snorkel entre piedras y pequeños bancos de arena. No hay servicios, ni sombras, ni grandes espacios. Pero lo que sí hay es una sensación de calma absoluta, perfecta para quienes buscan belleza sin artificios.

Cala Codolar
Al abrigo del imponente Cap de Barbaria, Cala Codolar es una de las calas más desconocidas y salvajes de Formentera. Se encuentra justo bajo los acantilados, en una zona sin senderos ni acceso terrestre, lo que la convierte en un destino exclusivo para quienes se acercan por mar.
Esta pequeña cala pedregosa no tiene arena ni comodidades, pero lo compensa con creces gracias a su entorno intacto. Aquí la naturaleza se muestra tal como es: roca, mar y cielo. Las aguas, limpias y profundas, son perfectas para darse un baño con total intimidad, rodeado de paisaje árido y magnético. Muy cerca se encuentran también algunas cuevas y recovecos interesantes para los que disfrutan explorando con máscara y tubo.
No es el típico lugar para fondear durante horas, pero sí una parada que deja huella. Ideal para quienes quieren salirse de lo habitual y conocer la cara más remota y mineral de la isla.
Racó Fondo y Racó des Cans
Entre Cala Saona y el extremo del Cap de Barbaria se esconden estas dos pequeñas calas sin señalización y fuera del radar turístico. Acceder a ellas desde tierra es prácticamente imposible, lo que las convierte en paradas muy valoradas por quienes navegan la costa suroeste de Formentera en busca de tranquilidad total.
Ambas calas son rocosas, silenciosas y sin apenas espacio para estirarse fuera del agua, pero ofrecen un refugio perfecto para fondear y desconectar. Están rodeadas de acantilados bajos y vegetación mediterránea, sin ninguna construcción a la vista, lo que refuerza esa sensación de estar en un lugar secreto.
Son ideales para un baño rápido o una pausa contemplativa durante una excursión en catamarán. Aquí no hay nadie. Solo el mar, el sol y ese tipo de silencio que no se encuentra en las playas más conocidas. Si buscas un momento de paz auténtica, estos dos rincones son un tesoro.
¿Te apetece descubrir estos rincones? Puedes reservar aquí tu excursión en catamarán por Formentera y explorar la isla desde una perspectiva mucho más especial.
Las playas más bonitas e imprescindibles de Formentera
Si vienes por primera vez a Formentera, hay algunas playas que simplemente no te puedes perder. No importa si llegas por tierra o por mar: son las más conocidas por una razón. Algunas destacan por el color del agua, otras por su tranquilidad o por el entorno salvaje que las rodea. Aquí va nuestra selección de las playas más bonitas de Formentera, perfectas para pasar el día, bañarte, hacer fotos y entender por qué esta isla enamora a todo el que la pisa.
Playa de Ses Illetes
Probablemente la más famosa de la isla, y con razón. Arena blanca, aguas turquesa y ese efecto “Maldivas” que tanto llama la atención.
Situada dentro del Parque Natural de Ses Salines, Ses Illetes es, sin duda, la playa más emblemática de Formentera. Sus aguas poco profundas de color turquesa, junto con la finísima arena blanca, le han valido comparaciones con destinos exóticos del Caribe. Pero aquí, el lujo es la naturaleza.
Aunque el acceso en coche o moto está limitado (con control de entrada en temporada alta), muchos visitantes optan por llegar en bicicleta o incluso a pie, siguiendo los senderos que cruzan el parque. Esta regulación no solo protege el entorno, sino que garantiza una experiencia más tranquila y respetuosa con el medio ambiente.
A lo largo de su orilla se reparten varias zonas donde fondean embarcaciones, y es habitual ver veleros y catamaranes recortando el horizonte. Ya sea para un baño relajado, una jornada de sol o una caminata por la lengua de arena que se adentra en el mar, Ses Illetes es una visita obligada para cualquiera que pise la isla.

Cala Saona
Cala Saona es una de las calas más completas de Formentera, tanto por su belleza natural como por su facilidad de acceso. Situada en la costa oeste de la isla, su entorno está rodeado de acantilados bajos y rojizos, que contrastan con las aguas cristalinas y calmas que la caracterizan.
Es una playa familiar, ideal para pasar el día entero gracias a su ambiente tranquilo y a la variedad de servicios que ofrece en los alrededores, desde restaurantes hasta alojamientos. Además, es una de las mejores zonas de la isla para disfrutar del atardecer, con vistas al horizonte que pintan el cielo de naranja y violeta mientras el sol se esconde tras el mar.
También es una de las calas favoritas para quienes navegan la isla en catamarán, ya que se puede fondear con seguridad muy cerca de la costa. Una combinación de facilidad, belleza y ambiente que la convierte en una parada imprescindible.

Playa de Migjorn
Una de las más largas de la isla, y también una de las más variadas. No es solo una playa, sino todo un tramo de costa que abarca más de 6 kilómetros al sur de Formentera. Se trata de la zona más extensa y diversa de la isla, con una sucesión de arenales, rocas, dunas y caminos que se entremezclan para ofrecer una experiencia de playa más salvaje y libre.
Lejos del bullicio de otras zonas más famosas, aquí encontrarás tanto zonas tranquilas y aisladas como chiringuitos y restaurantes donde parar a comer con vistas al mar. Lo interesante de Migjorn es que no hay una sola Migjorn, sino muchas: puedes pasear de una zona a otra y sentir que cada tramo es diferente. Desde Ca Marí, más familiar y accesible, hasta Es Arenals o Es Copinar, más abiertas y con paisajes que recuerdan a playas atlánticas.
Es también una playa ideal para quienes buscan practicar paddle surf o simplemente caminar por la orilla sin rumbo. En los días en los que sopla el viento del norte, Migjorn es uno de los mejores lugares para resguardarse y disfrutar del mar con calma.

Cala en Baster
Situada al noreste de Formentera, cerca del pueblo de Sant Ferran, Cala en Baster es una cala que rompe con la idea clásica de playa. Aquí no encontrarás arena fina ni hileras de sombrillas, sino un paisaje rocoso y casi lunar, rodeado de acantilados bajos donde los antiguos pescadores excavaron cuevas en la piedra para guardar sus barcas.
El acceso es sencillo desde San Ferran, aunque el tramo final requiere bajar por un sendero algo irregular. La recompensa es un entorno auténtico, sin masificaciones, ideal para quienes valoran la tranquilidad, el snorkel y los paisajes diferentes. Bajo el agua, los fondos marinos están llenos de vida, y sobre tierra, las casetas y estructuras excavadas forman un escenario perfecto para los amantes de la fotografía o la historia local.
Cala en Baster es una de esas calas que no suele salir en las postales, pero que enamora a quienes buscan una experiencia más cruda, más natural y menos turística. Perfecta para pasar un rato desconectado del mundo, solo con el mar delante y la roca como único techo.

Playa de Cavall d'en Borràs
Situada dentro del Parque Natural de Ses Salines y muy cerca del puerto de La Savina, Cavall d’en Borràs es una de esas playas que sorprende por su tranquilidad, a pesar de estar tan cerca de la zona más transitada de la isla. Desde tierra se puede llegar caminando o en bici, pero lo verdaderamente especial es descubrirla desde el mar, fondeando frente a su orilla de aguas tranquilas y poco profundas.
La playa está rodeada de vegetación autóctona y dunas protegidas, sin grandes construcciones a la vista. El ambiente es relajado, con una mezcla de visitantes que llegan temprano en bicicleta y embarcaciones que fondean para pasar el día lejos del bullicio. En temporada alta, su acceso por tierra puede saturarse, pero desde el mar sigue siendo un refugio sereno con vistas directas a Ibiza y Es Vedrà al atardecer.
Muy cerca se encuentra el conocido restaurante Beso Beach, aunque fondear aquí te permite mantener cierta distancia y disfrutar del entorno natural sin renunciar al confort. Una cala perfecta para quienes buscan comodidad sin renunciar a la sensación de estar en mitad de la naturaleza.
Las mejores playas de Formentera según el viento
Una de las cosas más importantes que poca gente tiene en cuenta al planear un día de playa en Formentera es el viento. Y sí, en una isla tan abierta y expuesta, el viento puede hacer que una playa paradisiaca se convierta en un lugar incómodo lleno de arena volando.
Un consejo que te puede cambiar el día es revisar la previsión del viento antes de elegir playa, por ejemplo con aplicaciones como la de Windguru. En Formentera, el viento condiciona muchísimo el estado del mar y la experiencia en la arena. Pero no te preocupes, porque siempre hay alguna cala bien resguardada según desde dónde sople. Aquí te dejamos una selección de playas recomendadas según la dirección del viento.
- Si sopla viento del este (levante), la costa oeste está en calma: Cala Saona, el lado norte de Illetes o Caló des Mort suelen estar protegidas.
- Si viene del oeste (poniente), toca moverse a la zona este: Ses Platgetes, Es Caló o algunos tramos de Migjorn serán apuesta segura.
- Y si el viento es del norte, las playas del sur como Migjorn, Cavall d’en Borràs o zonas menos expuestas ofrecen mejor baño.
Mapa de las playas y calas de Formentera mencionadas
Aunque Formentera sea una isla pequeña, muchas de sus playas están bastante alejadas entre sí o tienen accesos poco señalizados. Si es tu primera visita o simplemente quieres aprovechar al máximo el tiempo, tenerlo todo ubicado ayuda y mucho.
Aquí te dejamos un mapa con todas las playas y calas que hemos mencionado en esta guía, para que puedas ver de un vistazo dónde está cada una y decidir cuál encaja mejor con tu plan: pasar todo el día, hacer una parada rápida o descubrir algún rincón escondido desde el mar.

Este artículo lo hemos creado a partir de nuestras propias rutas por Formentera, sumando lo que hemos vivido navegando por sus costas y lo que recomiendan quienes más conocen la isla. No es una lista al azar, sino una selección basada en experiencia real.
Esperamos que te sirva para planear tu escapada y que te ayude a descubrir lo mejor de esta isla única. Nos vemos entre aguas turquesa y puestas de sol.
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